martes, 3 de febrero de 2009

Un hombre pierde una oreja de un corte durante una pelea


Sucesos

La víctima fue asaltada por un grupo en una discoteca de Crevillente tras discutir con el portero
CREVILLENT

Un sábado como otro cualquiera pudo acabar en tragedia este pasado fin de semana en Crevillent. Todo ocurrió en la madrugada del domingo, cuando la pareja formada por Sid Ahmed Djebbar y Rajaa Azmy, un argelino y un marroquí residentes en Elche, acudieron a la discoteca Kasba. El local de Crevillent suele estar frecuentado por personas de origen magrebí.

Hacia las 5.30 horas, según la versión de los afectados, el portero del local se acercó a la barra donde se encontraba Sid Ahmed "para ofrecerle droga". Tras su negativa, el joven se acercó a su acompañante, que se encontraba en el aseo, para pedirle que se fueran "porque no me gustaba lo que estaba viendo", asegura Sid Ahmed.

En la puerta de la discoteca les esperaban, además del portero, un grupo de personas que tiraron al joven magrebí al suelo. "Comenzaron a pegarle y le quitaron los objetos personales. No pude hacer nada porque el portero me agarró de los brazos", sostiene Rajaa. "Hasta que uno de ellos sacó una navaja y le cortó parte de la oreja ", añade.

Los agresores pararon al observar que pasaba una patrulla de la Guardia Civil que no se detuvo, aseguran. Rajaa afirma que en ese momento pudo levantar a su pareja y salir a la calle con ayuda de un desconocido, quien les llevó hasta el cuartel de la Benemérita.

Los agresores, subidos en un Seat León, les persiguieron. "No podíamos parar en los semáforos por miedo a que nos hicieran algo", añade. Al llegar allí fue enviado a Urgencias, antes de prestar declaración, por la herida que presentaba.

El portero de la discoteca fue detenido, aunque quedó en libertad tras su declaración. La Guardia Civil ofrece otra versión de lo ocurrido. Sostienen que la disputa se originó tras el empujón a una mujer española en el local. la pareja fue invitada a abandonar la discoteca, pero fuera siguió la reyerta.

"Ahora iremos al médico de cabecera, aunque ya nos han dicho que es posible que pierda algo de audición", asegura la pareja del herido. Otro de los agresores, A. G., pasó ayer a disposición judicial, mientras que el conductor del coche que los perseguía se dio a la fuga.

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