El acusado acepta una pena de 15 años de prisión ante un jurado popular
EFE| ALICANTE
Culpable de homicidio. Este fue el sencillo veredicto emitido por un jurado en Elche, una decisión sin dificultad alguna después de que el procesado reconociera ante el tribunal popular haber acabado a golpes con la vida de su mujer.
El acuerdo de conformidad alcanzado el pasado miércoles por el fiscal y la defensa del procesado permitió rebajar de 20 a 15 años la pena finalmente impuesta al acusado.
El crimen se produjo en agosto de 2005 en una vivienda de vacaciones de la pareja en San Fulgencio. El acusado, de 31 años y nacionalidad británica, reconoció en el juicio que, mientras estaba con su mujer y sus tres hijos en el salón de la citada residencia, se dirigió hacia su esposa y empezó a propinarle golpes.
Cuando la víctima ya se encontraba tendida en el suelo, el acusado pidió a sus hijos, de 8, 5 y 1 años, que se acostaran en el dormitorio de matrimonio, obligándoles a pasar junto a su madre, a la que vieron tumbada y sangrando.
El acusado siguió agrediendo a la mujer. Esta pereció más tarde como consecuencia de una "insuficiencia cardiorrespiratoria" provocada por "los golpes recibidos en la cabeza y en el cuello", según el fiscal. Después de la agresión, el acusado se dio una ducha y se acostó con sus tres hijos en la habitación conyugal, donde durmieron toda la noche. A la mañana siguiente, una tía del procesado, que se hallaba desde unos días antes en San Fulgencio para pasar las vacaciones con la familia, accedió a la vivienda y descubrió el cuerpo sin vida de la mujer. El crimen se descubrió tras su llamada a la Guardia Civil.
En un primer momento, el abogado de la defensa argumentó durante el juicio que el acusado se hallaba bajo los efectos del alcohol y estupefacientes. El propio procesado le corrigió y dijo haber actuado "en plenitud de facultades".
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