01.02.09 - Condenado a un año de prisión por desnudar a su ex novia y abandonarla en Xeraco

Sucesos
La víctima negó los hechos en el juicio y dijo que se inventó cosas para proteger a su hija
VALENCIA


La Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a un año de prisión a un joven acusado de arrancar el bikini de su ex novia tras una discusión, desnudarla en un campo de naranjos a plena noche y abandonarla. Durante el juicio, la joven negó los hechos y afirmó que "exageró" porque tenía miedo a que su ex pareja le quitara a la hija que tienen en común, de ocho meses de edad.

El fiscal pedía una pena de nueve años y dos meses de prisión para el joven por dos delitos de maltrato en el ámbito familiar, otros de trato dregadante, otro de detención ilegal y uno más de amenazas. Finalmente, el tribunal le condenó a un año por trato degradante y a otro por maltrato en el ámbito doméstico. Además, le prohibió acercarse a su ex novia a menos de 500 metros durante dos años.

El tribunal rebajó la condena al entender que no fue posible relacionar las lesiones que presentaba la joven con la conducta que se le imputaba a su ex pareja, ya que ésta manifestó que se las hizo con las ramas de los naranjos cuando caminó desnuda entre ellos.

Según el tribunal, no quedó probado el delito de detención ilegal, ya que la joven explicó que, aunque en principio no quería entrar en el vehículo con su ex pareja, al final accedió voluntariamente.

El 16 de junio de 2008, el joven vio a su ex pareja paseando por la playa de Tavernes de la Valldigna con una amiga y se acercó a ella. En ese momento, movido por los celos, le recriminó que llevara un bikini muy pequeño y le preguntó si lo que quería era que "todos los tíos le vieran las tetas". En mitad de la discusión, le arrancó el tirante del bikini y luego le dio una toalla para que se tapara.

Dos días más tarde, sobre las 21 horas, ambos se trasladaron en una furgoneta que él conducía hasta la playa de Xeraco (Valencia) donde, tras mantener otra discusión, le arrancó por la fuerza la camiseta, la falda, el sujetador y la demás ropa que llevaba. Después la dejó en una zona de naranjos desnuda y se marchó del lugar. Debido a esto, ella sufrió excoraciones lineales en el tórax, muslo y rodilla.

A pesar de este relato, tanto el acusado como la joven negaron los hechos en el día del juicio. Ambos coincidieron en que el primer día, el 16, mantuvieron una discusión en la playa porque ella hacía días que no le dejaba ver a la hija que tienen en común, pero negaron que él le zarandeara o le rompiera el bikini, ya que el tirante se fracturó porque, según dijo la joven, "era muy fino".

En cuanto al día 18, la mujer aseguró que subió a la furgoneta "voluntariamente", para "hablar", y entonces fueron hasta un campo. Allí, volvieron a discutir y, tras ello, ella se bajó del coche y se escondió detrás de un árbol hasta que él se fue. Afirmó que la ropa se le rompió al bajar porque ambos se estaban "estirando", y que él estuvo buscándola durante algún tiempo.

La joven indicó que las lesiones que presentaba se las hizo con los árboles y que, en ese momento, exageró los hechos a la policía que le atendió y se "inventó mucho" por miedo a que su ex pareja se llevara a su hija. Indicó que no tenía miedo de él, sino que adoptó esa actitud porque "no quería que se saliera con la suya, como siempre".