La policía investiga si el hombre, que entró por una ventana, se escondió para robar en el edificio
J. A. MARRAHÍ| VALENCIA
Hueco del falso techo por el que cayó el presunto ladrón, ayer, en la Facultad de Psicología. El misterio reinaba ayer en la Facultad de Psicología de Valencia. Un intruso que se coló en el edificio acabó herido muy grave al precipitarse desde una altura equivalente a un sexto piso, después de que cediera el falso techo en el que se ocultaba. La Policía Nacional ha abierto una investigación para aclarar los hechos. Por el momento, todos los indicios apuntan a que se trata de un ladrón.
Todo ocurrió alrededor de las tres de la madrugada, en el número 25 de la avenida Blasco Ibáñez de la ciudad. Un testigo dio la voz de alarma desde el Colegio Mayor Luis Vives, ya que vio al extraño individuo trepando por la fachada. De este modo, dos vigilantes de seguridad de Promasa se dirigieron a toda prisa al edificio de Psicología para comprobar que ocurría.
Según las averiguaciones del personal de Psicología y de la policía, todo hace pensar que el intruso entró en el edificio por la ventana del despacho de un profesor, que se encuentra en el segundo piso. Una vez en esta dependencia abrió la puerta desde dentro y accedió al recinto. "Lo que hizo después es un misterio. No lo sabemos, pero no ha aparecido nada revuelto ni se llevó nada de este despacho", explicó el decano de la facultad, José Ramos.
En ese momento, el edificio educativo estaba cerrado y vacío. Los empleados de seguridad abrieron la puerta y se dirigieron a las escaleras de la facultad, situadas a la derecha de la entrada. Fue allí donde se encontraron la dramática escena. Un hombre de unos 40 años yacía en el suelo en medio de un enorme charco de sangre.
La víctima de la caída todavía estaba consciente y se quejaba con amargura. Se ignora por qué motivo, no llevaba camisa. Los vigilantes avisaron a la policía y requirieron la presencia urgente de un equipo médico. La proximidad de Psicología al Hospital Clínico agilizó la atención al herido. El hombre fue evacuado al centro sanitario, donde quedó ingresado con un fuerte golpe en la cabeza.
Al inspeccionar las instalaciones, los agentes descubrieron lo que había ocurrido. Al parecer, el intruso se había ocultado en el interior de un falso techo que está situado en la cuarta y última planta, con una altura equivalente al sexto piso de una finca.
Golpe en la barandilla
Debido a su peso, las finas planchas cuadradas cedieron justo bajo en el hueco de la escalera y la víctima cayó al vacío. Al parecer, antes de impactar contra el suelo se golpeó contra la barandilla metálica del segundo piso, donde aparecieron restos de sangre.
La policía se puso de inmediato en contacto con los responsables de la Facultad de Psicología. Comprobaron que el herido era no era ningún profesor ni estudiante del centro, "sino una persona ajena a la comunidad educativa", como aclaró el decano.
Ramos confirmó que no faltaba nada en los despachos de los profesores ni en otras zonas del edificio, con lo que no ha quedado claro cuáles eran las intenciones del misterioso intruso. La policía espera que se recupere de sus lesiones para poder interrogarlo y saber así qué pretendía. "Ante las evidencias creemos que iba a robar y sufrió una caída accidental, pero es sólo una suposición", quiso dejar claro el decano de Psicología.
"Lo único que hay de valor en esa zona del edificio son ordenadores de los despachos de los profesores, pero se suelen cerrar con llave", agregó Ramos, sorprendido por lo inusual de la situación. "Jamás se había producido un intento de robo de estas características. Alguna vez han desaparecido videoproyectores o se ha detectado la presencia de carteristas en la biblioteca, pero nada más", destacó el responsable universitario.
La policía mantiene abierta la investigación. Al cierre de esta edición, los agentes trataban de identificar a la víctima de la aparatosa caída, que seguía ingresada con graves lesiones en el Hospital Clínico.
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