miércoles, 30 de abril de 2008

Valencia sufrió 26 crímenes en 2007


Valencia sufrió 26 crímenes en 2007,la cifra más baja de los últimos siete años
El Instituto de Medicina Legal constata un incremento de los suicidios y las muertes naturales repentinas

30.04.08 -
Un total de 26 personas murieron asesinadas el año pasado en la provincia de Valencia. Esta cifra es la más baja de los últimos siete años, según la memoria del Instituto de Medicina Legal, que fue presentada ayer. Este informe sobre la actividad forense constata un sensible descenso de las muertes por accidente y un incremento de los suicidios, sobre todo en hombres. También destaca la presencia cada vez mayor de fallecimientos inesperados, la mayoría debidos a enfermedades cardiovasculares, infecciones y hemorragias.
En la provincia de Valencia cada vez hay menos crímenes. Así se desprende de la Memoria del Instituto de Medicina Legal (IML) de Valencia, encargado de realizar las autopsias, que fue presentada ayer en la Ciudad de la Justicia.

En 2007, hubo un total de 26 asesinatos, lo que supone la cifra más baja desde el cambio de milenio. En el año 2005 se produjo un importante repunte en el que se alcanzaron los 40 homicidios, y desde entonces el número de estas muertes violentas no ha hecho más que descender.

El año pasado, la mayoría de asesinatos se produjeron a golpe de navaja o cuchillo, un elemento más propio de los enfrentamientos pasionales o callejeros. El director del Instituto de Medicina Legal, Matías Vicente, destacó que el arma blanca ha estado presente en 14 de los 26 homicidios. "Es un método que aparece por encima del arma de fuego, que en 2006 cobró más protagonismo", destacó el experto forense.

El conseller de Justicia, Fernando De Rosa, valoró positivamente el descenso de crímenes en la provincia de Valencia. "Hay que alegrarse de que estas muertes violentas se hayan reducido. Puede deberse a la mayor eficacia policial, a las campañas contra la violencia y a otros muchos factores", consideró De Rosa.

"Sin embargo, nos siguen preocupando los asesinatos de violencia doméstica, que han ido a más. El año pasado acabamos con 11 muertes de este tipo y este ya llevamos siete en la Comunitat Valenciana", recordó el conseller.

Otro dato llamativo dentro de la memoria de 2007 es el descenso de los muertos por accidentes. La cifra de fallecidos en siniestros de todo tipo fue de 515, lo que supone 60 menos que el año anterior. En este apartado, Matías Vicente destacó la importancia de la "reducción de accidentes de tráfico y el hecho de que en 2006 hubo muchas víctimas en un sólo siniestro", en referencia al trágico accidente de metro en Valencia que segó la vida de 43 personas.

Pero también hubo malas noticias. Crecen los suicidios. En 2007 se quitaron la vida 229 personas, que es la cifra más alta desde 2003. "Se han producido 30 suicidios más que en 2006 y es muy complicado interpretar el por qué", lamentó el director del IML.

En la distribución de muertes violentas por sexos, las cifras no cambian. Los hombres superan con creces a las mujeres. En palabras de Matías Vicente, "parece que ellos están mucho más predispuestos a morir violentamente". En el caso de los homicidios, en 2007 fueron asesinados 19 hombres, casi el triple que mujeres. En cuanto a suicidios, 172 hombres se quitaron la vida en este periodo, frente a las 57 mujeres. Los accidentes segaron la vida de 377 hombres y 138 mujeres.

Las muertes naturales también tienen una importante presencia en la memoria del IML. Normalmente, este tipo de fallecimientos no es objeto de autopsia o investigación judicial, puesto que se deben a enfermedades y se producen en hospitales. Lo que ocurre es que muchas personas que fallecen repentinamente, solas en sus casas, o sin un deterioro físico constatado por un médico son sometidas a análisis forenses para poder explicar la razón del óbito. Y cada vez hay más.


Autopsias por muerte natural
El IML realizó 777 autopsias en 2007 por muertes naturales, es decir siete más que por muertes violentas. El responsable de los forenses valencianos especificó que las causas de estos fallecimientos "son similares a las de años anteriores y se deben principalmente a enfermedades cardiovasculares, seguidas de las de origen infeccioso, hemorrágico, digestivo o de origen hepático y neurológico".

Al respecto, De Rosa recordó que se ha suscrito un convenio con la Conselleria de Sanidad, ya que cada año el IML realiza más análisis sobre muertes naturales. "Hay más muertes en domicilios de ciudadanos de menor edad y se desconocen las causas, por lo que hay que analizarlas". Sobre ellas interviene directamente el instituto, "ya que son sospechosas de un origen extraño".

El objetivo es, aseguró, aportar a la conselleria datos sobre "por qué una persona que está aparentemente sana de repente sufre un colapso y se muere". Se persigue conocer bien las causas y, de esta manera, poder "alertar a las familias de los fallecidos por si hay tendencias a muertes súbitas". Con ello, el IML actúa de manera preventiva, "para que los ciudadanos puedan conocer los riesgos de tener cualquier tipo de enfermedad", recalcó el conseller.

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