sábado, 30 de agosto de 2008

Dos explosiones dentro de una fosa séptica desatan la alarma en el centro de Mislata


Sucesos
Los estallidos levantaron parte del pavimento junto a los desagües del corral de la casa

Bomberos y algunos vecinos, ayer, a la puerta de la vivienda en cuya fosa séptica se produjeron las explosiones. El centro de Mislata fue ayer escenario de una curiosa e inusual emergencia. Dos explosiones encadenadas atronaron bajo tierra. Al principio, nadie entre los vecinos sabía cuál era la causa exacta del fenómeno. Una inspección de policías y bomberos sacó a la luz el posible origen: una acumulación de gases producida en el interior de una fosa séptica.

Todo comenzó sobre las seis y media de la tarde. Las explosiones retumbaron en los alrededores del número siete de la plaza de la Cosntitución. "Fueron como dos disparos de masclets muy fuertes, secos y muy seguidos, procedentes de debajo del suelo", aseguró un testigo de los extraños estallidos. "Pensábamos que había jóvenes disparando petardos en la calle", relató otro residente que escuchó el estrépito.

Los testigos, asustados por la intensidad de las explosiones, decidieron dar la voz de alarma a las fuerzas de seguridad, temerosos de que hubiera ocurrido una desgracia en el interior de la vivienda. Al lugar se desplazaron agentes de la Policía Nacional, miembros de la Policía Local de Mislata y efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos.

Los agentes acordonaron la zona por seguridad e inspeccionaron la casa de la que, aparentemente, provenían los estruendos. Se trata de una vivienda antigua, de planta baja y una altura, que estaba desocupada en el momento de los hechos, según informaron fuentes policiales. La vivienda está situada en el casco antiguo de la población, muy cerca del Ayuntamiento de la localidad de l'Horta.

Al parecer, las explosiones se debieron a una acumulación de gases en las tuberías existentes en el corral de la vivienda. Parte del pavimento de la casa quedó dañado por la fuerza de los estallidos, que no causaron víctimas. Los expertos que trabajaron en el lugar descartaron que existan fugas de gas en los alrededores, como era el temor de los vecinos. Hoy está previsto que el Ayuntamiento reciba un informe más concreto sobre la naturaleza de estas explosiones.

Tras la emergencia, los agentes de la Policía Local trataron de localizar al dueño del inmueble para explicarle lo que había ocurrido. Al cierre de esta edición, el propietario aún no había sido localizado.

La acumulación de gases puede convertirse en un peligro que, en ocasiones, es difícil de detectar. Una mujer falleció en abril como consecuencia de una deflagración en su domicilio del número 5 de la calle Tres Marías de Burjassot. Al parecer, la víctima iba a encender fuego cuando se vio sorprendida por una acumulación de gases de origen no precisado que la envolvió en llamas.

Un vecino señaló que Fina, la víctima, "era fumadora", por lo que posiblemente habría salido a encender un cigarrillo, y en ese instante se habría producido la inesperada llamarada, tal vez por gases de productos de limpieza. En la vivienda se encontraba su hija de 34 años, que tuvo que ser trasladada al hospital tras inhalar humo.

El marido de Fina poco llegó después, ya que había ido a comprar. Otro vecino, Manuel Escobar, de 58 años, fue el primero en acudir hasta el domicilio al ver humo.

sucesos@lasprovincias.es

No hay comentarios: